Lúcido
Es la otra vida. La paralela. La que apenas intuyo. La que está hecha de resignaciones y prescripciones ontológicas. No me explico bien. La que está hecha de sus residuos. De aquello que continúa vivo a pesar de que fue tocado por la muerte. Palpitante. Por eso quiero dormir siempre aunque el insomnio. Tirarme desde la absurda altura de mis ensoñaciones y planear en el vacío de lo que está por acontecer. Allí estoy realmente. No me podrán encontrar de otra forma.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por compartir sobre tu propia esquina del ahora.