Años

Los años son criaturas depredadoras. Los vivís con el espejismo de un para siempre. Una vez que, con su insidiosa insistencia de 365 días, los considerás vividos, se te alojan en lo más profundo de la psique y en lo más profundo de las células y comienzan a roer tus ínfulas de eternidad. Por eso hay que distraerlos, darles un buen pedazo de este cuerpo cuerpo y proteger aquella íntima libertad que se nos concede después de la muerte.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ecología del adentro

Abismo

Aquellos lugares